Dr. Douglas K. Rex (Fellow del Colegio Americano de Gastroenterología) y 
Dr. Suthat Liangpunsakul 
División de Gastroenterología y Hepatología, Departamento de Medicina, Facultad de Medicina de la Universidad de Indiana
Indianapolis, Indiana

¿Qué es el cáncer colorrectal?

El cáncer colorrectal o del intestino grueso es una enfermedad en la cual se forman células malignas, es decir cáncer, en el revestimiento interior del colon o del recto. El intestino grueso está conformado tanto por el colon, como por el recto. El intestino grueso es la última parte del sistema digestivo, y las primeras tres secciones están conformadas por el esófago, estómago e intestino delgado. La principal función del intestino grueso es reabsorber el agua de los contenidos del intestino, a fin de que el desecho sólido se pueda expeler en el inodoro. El colon está formado por metro y medio de intestino grueso, y los últimos 15 centímetros le corresponden al recto.

La mayoría de cánceres de colon y recto se originan en crecimientos similares a las verrugas, llamados pólipos, que aparecen en el revestimiento interior del colon o recto. No todos los pólipos tiene el potencial de transformarse en cáncer, pero aquellos que tienen tal capacidad se denominan adenomas. En la mayoría de casos, a un adenoma le lleva más de 10 años convertirse en cáncer. Esa es la razón por la que algunas pruebas para prevención del cáncer son eficaces, a pesar de que se realicen con intervalos de 10 años. Sin embargo, un intervalo de 10 años es demasiado largo en algunos casos, tales como en el de las personas con colitis ulcerosa o con la enfermedad de Crohn, o en aquellas con fuertes antecedentes familiares de cáncer colorrectal o de adenomas.

¿Cuán común es el cáncer colorrectal?

En general, el cáncer colorrectal es el segundo tipo de cáncer mortífero más común, y la tercera causa más común de muertes relacionadas al cáncer en los Estados Unidos, tanto en hombres como en mujeres. El cáncer de pulmón y el de próstata son más comunes en los hombres, y el de pulmón y mama, en las mujeres. En el año 2003, hubo 147.000 nuevos casos, y fueron 57.100 las muertes por cáncer colorrectal.

¿Cómo se detecta el cáncer colorrectal?

Detectar significa buscar un cáncer o pólipos cuando los pacientes no presentan síntomas. La posibilidad de sobrevivir al cáncer colorrectal aumenta dramáticamente cuando éste se detecta antes de que los síntomas se presenten. La identificación y extirpación de pólipos antes de que se vuelvan cancerosos realmente previene el desarrollo de un cáncer colorrectal.

¿Quiénes tienen riesgo de presentar cáncer colorrectal?

¿Cuáles son los síntomas del cáncer colorrectal?

Los síntomas del cáncer colorrectal varían dependiendo de la ubicación del cáncer en el colon o recto, aunque es posible que no haya síntomas en absoluto. El pronóstico tiende a ser peor en las personas que presentan síntomas que en aquellas que se encuentran asintomáticas. El síntoma más común que se presenta en el cáncer colorrectal es el sangrado rectal. Los cánceres que surgen del lado izquierdo del colon generalmente ocasionan sangrado, y en los últimos estadíos, pueden provocar estreñimiento, dolor abdominal, y síntomas de obstrucción. Por otra parte, las lesiones del lado derecho pueden producir dolores abdominales imprecisos, pero es improbable que se presenten como una obstrucción o una alteración de los hábitos intestinales. El cáncer del lado derecho del colon puede estar acompañado de otros síntomas, tales como debilidad, pérdida de peso, o anemia proveniente de la pérdida crónica de sangre. Debe acudir de inmediato al médico si presenta algunos de estos síntomas.

Aunque no tenga síntomas, ¿por qué se le debe revisar para cáncer colorrectal?

Los adenomas pueden crecer durante años y transformarse en cáncer sin producir ningún síntoma. Para cuando se presentan los síntomas, normalmente es ya muy tarde para curar el cáncer porque éste se ha diseminado. Las pruebas de detección identifican tempranamente al cáncer y, como resultado, previenen el cáncer al conducir a la extirpación de adenomas, que son los pólipos pre-cancerosos.

¿Cuáles son las pruebas de detección disponibles?

¿Qué más puedo hacer para prevenir que se desarrolle un cáncer colorrectal?

Las observaciones recientes sugieren que el uso regular de medicamentos antiinflamatorios no esteroides o de aspirina disminuye las posibilidades de muerte por cáncer colorrectal en un 30 a 50%. Estos medicamentos también presentan riesgos, especialmente de sangrado intestinal, y los pacientes deben consultar con sus respectivos médicos sobre la conveniencia de usar regularmente estos agentes. El folato, el calcio y los estrógenos post-menopáusicos ofrecen un modesto beneficio de protección contra el cáncer de colon. También brindan beneficios las dietas ricas en fibra (vegetales) y bajas en grasa, el ejercicio regular, el mantenimiento normal del peso corporal y el dejar de fumar. Sin embargo, ninguna de las medidas es igual de eficaz, ni debe reemplazar a las pruebas de detección para cáncer colorrectal.